Mi nombre es Carlos barajas, mi trabajo me gusta por que aqui no tengo quien me mande, por que yo soy mi propio jefe, y me llena de orgullo cuando llevo ladrillo y veo las casas que hacen con mi ladrillo y si, se que es un poco pesado pero es muy gratificante ver que con mi esfuerzo mucha gente puede construir unas hermosas casas.
Cuando llueve mucho a veces se nos suelen caer las trinchas, se pierde mucho ladrillo, a veces los perros nos pisan el ladrillo, tambien se dificulta en muchas ocasiones ir por la madera con la que hacemos el ladrillo, tambien a veces no hay agua en los pozos y pues no hay de otra, asi que cuando sucede eso, se pierde el dia y ninguno de mis trabajadores hace ladrillo y se pierde mucho ladrillo al dia, mÃnimo unos 4 mil a 5 mil ladrillos por solo ese dia que no hubo agua.